lunes, 23 de abril de 2012

Actividad: "Tenemos un problema"




TENEMOS UN PROBLEMA


Temática de las sesiones: toma de decisiones, empatía.


Líneas de acción tutorial: relación con el grupo.


Justificación: los alumnos deben aprender que en la vida  surgen nuevas situaciones, en las que tendrán que tomar decisiones, ya sea de manera individual como colectiva. Esta sesión supone una muy buena práctica para que empiecen a pensar por ellos mismos y a reflexionar sobre los problemas.

Objetivos específicos:
· Enseñar a los alumnos cómo solucionar problemas considerando todas las alternativas y elegir la más adecuada.
· Tener en cuenta el punto de vista de los demás a la hora de enfrentarse a un problema.
· Saber formarse una opinión y poder rectificar si entendemos que lo que proponen los otros es más razonable que lo que pensamos nosotros.


Contenidos: habilidades sociales y resolución de conflictos

Actividades y metodología:

-Actividad 1: Tenemos un problema.

Presentamos un problema que pueda resultar interesante a los alumnos. Puede ser alguna situación que se esté dando en la clase.
Ejemplos: grupos enfrentados, alumnos aislados, alumnos que se han peleado en el recreo, actitudes pasivas, etc.
         Formamos grupos de 4 o 5 alumnos y les pedimos que busquen entre todos posibles soluciones al problema. Deberán llegar a un acuerdo sobre cuál es la solución más adecuada. Un portavoz de cada grupo expone a los demás grupos la solución a la que han llegado; además explicarán el por qué de su elección. El profesor irá anotando en la pizarra las conclusiones de cada grupo.
         Decidimos entre todos qué solución es la más acertada. Si hemos tratado un tema que se da en el aula, intentamos comprometer a los alumnos para aplicar la solución aceptada por todos, en el grupo.


Adaptación para alumnos con Síndrome de Down: procuraremos que nuestro alumno con Síndrome de Down reciba ayuda de sus compañeros a la hora de hacer la actividad, así como conseguir que esté integrado en el grupo de trabajo.

Actividad 2: Reflexionar sobre la actividad anterior.


           En esta actividad los alumnos tendrán que volver a formar los grupos de la actividad 1. Repartiremos cartulinas y en ellas deberán escribir su opinión acerca de la solución que se alcanzó, señalando una cosa positiva y una negativa de lo planteado.
Si se ha puesto en práctica, contar que les ha parecido y si ha funcionado tal y como ellos esperaban.
Posteriormente las cartulinas se colocarán en la pared, formando el “mural de las soluciones”

Temporalización: esta sesión tendrá una duración de 2 horas. Se desarrollará durante el segundo trimestre y se repetirá más adelante, manteniendo los grupos y el orden de los miembros.

Instalación: Aula ordinaria

Materiales:
-Cartulinas
-Lápices, bolígrafos

Evaluación:

1.                   Criterios de evaluación:
-Comprobar si son capaces de atender manteniéndose callados y respetando el turno de palabra mediante la observación directa.
-Valorar la iniciativa a participar por parte de los miembros de cada grupo.
-Evaluar las habilidades comunicativas de los portavoces del grupo.

El bingo de los sentimientos.





EL BINGO DE LOS SENTIMIENTOS


Temática de las sesiones: emociones propias y de los demás.

Líneas de acción tutorial: relación en el grupo.

Justificación: los alumnos con Síndrome de Down a menudo son testarudos, sociales, y dependientes y les gusta estar con la gente. Por eso es importante que sepan relacionarse con los demás y reconocer diferentes tipos de emociones, tanto propias como ajenas
Objetivos específicos:
· Representar mediante mímica sentimientos y emociones.
· Reconocer situaciones en las que se experimentan diferentes sentimientos.
· Favorecer un clima de confianza entre los alumnos


Contenidos: expresión de sentimientos.


Materiales: debemos preparar cartones para jugar al bingo donde las casillas serán los nombres de diferentes sentimientos y emociones.



Actividades y metodología:
Damos a cada alumno un cartón para jugar al bingo. Cuando saquemos una palabra del bombo los alumnos tienen que representar el sentimiento o emoción que haya salido y después comprobar si la tienen en su cartón para tacharla.
Si un alumno canta línea, podrá pedir a cualquiera de sus compañeros que describa una situación en la que se haya sentido o emocionado como alguna de las palabras que hayan salido.
Cuando alguien cante bingo tendrá que narrar una historia en la que aparezcan las cuatro palabras de las esquinas de su cartón. Si tiene dificultades el resto de los compañeros le ayudarán. Después discutiremos si la historia que ha contado podría suceder en la realidad.

Adaptación para alumnos con Síndrome de Down:
Nuestro o nuestros alumnos con Síndrome de Down deberán ser puestos con otro compañero, el cual le ayudara a realizar la actividad y le explicará cualquier duda que pueda tener sobre el funcionamiento del bingo o el reconocimiento de las emociones.


Temporalización: esta sesión durara una hora de tutoría, y la realizaremos en el primer trimestre del curso.

Instalaciones: aula ordinaria.

Agentes implicados: tutor del curso.

Áreas curriculares: transversalmente podríamos hablar que esta temática sirve para todas las áreas de nuestro currículo, ya que ayudan a la mejora de realizar trabajos en grupos. Sobre todo en el área de Educación Física, practicando la expresión corporal y los movimientos motrices.

Evaluación:
     1.        Criterios de evaluación: comportamiento durante la dinámica. Esperar su turno en su sitio. Estar callados cuando un compañero está representando alguna actividad.
       2.      Instrumentos de evaluación: comprobación de los tableros del bingo. Observación del comportamiento y actitud participativa. 

Segunda actividad tutorial




SAL DEL LABERINTO

Temática de la sesión: como expresarnos y que los demás nos entiendan.

Líneas de acción tutorial: conocimientos del alumno y relación con el grupo

Justificación: a través de un divertido juego los alumnos con síndrome de Down aprenderán a expresar mensajes de forma clara y a interpretarlos adecuadamente. En esta actividad descubrirán cómo en muchas ocasiones no nos expresamos claramente o no sabemos escuchar y desarrollarán habilidades sociales que favorezcan su participación en grupos sociales en los que se desenvuelven, autoregulando su conducta y planificando sus propias acciones.

Objetivos específicos:
-  Saber expresar instrucciones de manera clara.
-  Tomar conciencia de que la comunicación siempre requiere intercambio de información.
-  Saber interpretar los mensajes orales que nos transmiten.
-  Favorecer la confianza entre los compañeros.

Contenidos: autoconcepto, expresión de sentimiento, actitudes del alumno.

Actividades y metodología:
Primero, antes de nada creamos un recorrido por la clase pegando cinta aislante en el suelo. Después pedimos dos voluntarios, a uno le taparemos los ojos con un pañuelo y el otro deberá indicar a su compañero qué camino tiene que seguir para llegar al final del recorrido.
El alumno que no puede ver no podrá pisar la cinta aislante y tampoco podrá hablar. El que da las instrucciones tendrá que ser muy claro para que su compañero no se salga del camino. Después, saldrán otros dos alumnos, en este caso el que lleve tapados los ojos podrá hablar y pedir aclaraciones a su compañero.
Podemos hacer más difícil el juego poniendo obstáculos en el camino como sillas o libros. Por último, comentaremos con los alumnos las diferencias que han encontrado entre las dos situaciones.

Temporalización: esta sesión tendrá una duración de 60 minutos, se llevará acabo en el tercer trimestre del curso.

Materiales:
                Necesitamos cinta aislante y sería conveniente realizar esta actividad en el gimnasio o en el patio del colegio para disponer de más espacio.

Instalaciones: aula ordinaria.
Agentes implicados: profesor tutor del curso.
Áreas curriculares: transversalmente podríamos hablar que esta temática sirve para todas las áreas de nuestro currículo, ya que ayudan a la mejora de realizar trabajos en grupos. Sobre todo en el área de Educación Física, practicando la expresión corporal y los movimientos motrices.

Evaluación:
       1.        Criterios de evaluación: comportamiento durante la dinámica. Esperar su turno en su sitio.  
      2.      Instrumentos de evaluación: comprobación del recorrido de los alumnos por el aula . Observación del comportamiento y la actitud participativa. 

Actividad para desarrollar en tutorías con niños con síndrome de Down




ADIVINA, ADIVINANZA
Temática de la sesión: aprender sobre la comunicación no verbal.

Línea de acción tutorial: la relación en el grupo.

Justificación: Es importante que nuestros alumnos, sobre los de síndrome de Down aprendan a interpretar lo que nos dicen los gestos, es decir, aprender a descifrar mensajes de comunicación no verbal, a valorarlos y a descubrir su significado.

Objetivos específicos:
-  Aprender a transmitir cosas sin hablar, mediante los gestos.
-  Aprender a descifrar mensajes de comunicación no verbal.

Contenidos: adquirir habilidades sociales, expresar sus sentimientos a los demás.

Actividades y metodología:
-  Actividad 1: para empezar dividimos los folios en cuatro partes. En cada parte escribimos una fase que represente una acción y después doblamos todos el papeles poniéndolos juntos, sobre una mesa.

Dividimos la clase en dos equipos (la mitad a la derecha de la clase que formará un equipo y la otra mitad a la izquierda como segundo equipo). Pedimos a un alumno de uno de los grupos que salga y coja un papel del montón y represente lo que hay en él escrito al resto de los compañeros, sin emitir ningún sonido.

Su equipo debe adivinar qué es lo que quiere representar y la respuesta debe ser lo más exacta posible en menos de un minuto. Si su equipo no acierta, pasará el rebote al otro equipo. Cada frase es un punto y cada rebote dos.
Gana el equipo que más puntos consiga.

Por ejemplo: En uno de los papeles pone que se represente “Pasear un perro”.
Al niño que le toque este papel tendrá, mediante gestos, representar esta acción para que su grupo lo adivine.

-  Actividad 2: la segunda parte de esta actividad consiste en la representación activa. Esta vez no existirán los grupo, de forma individual los niños se presentarán a sus compañeros diciendo características propias que los identifiquen. Los demás deberán interpretar no solo lo que está contando si no lo que el compañero  transmite con los gestos.

Temporalización: cada actividad dura 60 minutos, por lo que contaremos con dos sesiones de tutoría para poder llevarla a  cabo toda la dinámica.
Se realizará en el tercer trimestre, puesto que cuanto más se conozcan entre ellos, mejor podrán interpretar el objetivo que pretende esta actividad.

Instalaciones: el aula ordinaria.

Materiales: necesitaremos para el juego tantos folios como alumnos tengamos y un cronómetro (o un reloj segundero).

Agentes implicados: el tutor del curso.

Áreas curriculares: esta actividad podríamos integrarla en el área de Lengua, ya que practica la comunicación entre los alumnos. Pero sobre todo en el área de Educación Física, practicando la expresión corporal y los movimientos motrices.

Evaluación:  
1.       Criterios de evaluación:
El comportamiento que llevan en el desarrollo de la actividad.
Integración con los miembros de su grupo.
Originalidad a la  de proponer y  representar las acciones.

2.       Instrumentos de evaluación
Observación por parte del profesor a sus alumnos.
Revisar la información que escriben los niños en los papeles.
               


jueves, 19 de abril de 2012

Organización de las tutorías y los apoyos.


ORGANIZACIÓN DE LAS TUTORÍAS

1.      LAS FUNCIONES DEL TUTOR EN EDUCACIÓN PRIMARIA.

                Las funciones del tutor deben ser el punto de partida en la organización de la tutoría en sus tres ámbitos: alumnado, profesorado y familias.

            Para el desarrollo de estas funciones se organizarán las tutorías de la siguiente forma:

·        La acción tutorial la realizará el profesor/a tutor/a del grupo clase con el asesoramiento del Departamento de Orientación o el EOEP.
·        Las actividades de tutoría serán incluidas en la programación de aula.
·        La planificación de la acción tutorial se basará en un análisis inicial del grupo y las priorizaciones establecidas por el centro.

El tutor en relación con el alumnado

·        Atender a las dificultades de aprendizaje de los alumnos, procediendo a la adecuación personal del currículo
·        Facilitar la integración del alumno/a en el grupo y fomentar su participación en las actividades del centro.
·        Orientar y asesorar a los alumnos sobre sus posibilidades educativas.
·        Encauzar los problemas e inquietudes de los alumnos.
·        Informar a los padres, maestros y alumnos del grupo de todo aquello que les concierna a las actividades docentes y el rendimiento académico.
·        Atender y cuidar, junto con el resto de profesores del Centro, a los alumnos en los periodos de recreo y en otras actividades no lectivas.
·        Apoyar y reforzar el proceso de aprendizaje de aquellos alumnos que más lo precisen, evitando que progresivamente vayan quedando desconectados del currículo común.
·        Apoyar y reforzar al alumno desde el punto de vista socioafectivo motivándole en el aprendizaje y plateándole retos cognitivos que se sitúen dentro de sus posibilidades de obtención de éxito.
·        Solicitar el asesoramiento y la colaboración del Departamento de Orientación o del EOEP cuando el problema lo requiera.

El tutor en relación con la familia

·        Informar a los padres del grupo de todo aquello en relación con las actividades docentes y rendimiento académico.
·        Facilitar la cooperación educativa entre los maestros y los padres de alumnos.
·        Contribuir a la adecuada relación e interacción entre los distintos integrantes de la comunidad educativa, asumiendo el papel de mediación y, si hace falta, de negociación ante los conflictos o problemas que puedan plantearse.
·        Informar a los padres sobre contenidos mínimos del ciclo.
·        Informar sobre el rendimiento académico de modo periódico.
·        Asesorar sobre los modelos de intervención educativa.
·        Informar sobre los contenidos mínimos del ciclo siguiente.
·        Recabar su opinión sobre la promoción a otro ciclo o etapa educativa.
·        Informar sobre actitudes del alumno, ante el trabajo escolar, compañeros y adultos.
·        Informar sobre conductas.
·        Solicitar información de esos aspectos en casa.
·        Orientar posibles cambios y sugerir mejoras y facilitar entrevistas con otros profesores.
·        Estimular proyectos de actuación conjuntos con objetivos unificados.

El tutor en relación con los profesores.

·        Participar en el desarrollo del Plan de Acción tutorial y en las actividades de orientación, bajo la coordinación del jefe de estudios.
·        Coordinar el proceso de evaluación de los alumnos de su grupo y adoptar la decisión que proceda acerca de la promoción de los alumnos de un ciclo a otro, previa audiencia de los padres o tutores legales.
·        Colaborar con el Equipo de Orientación Educativa y psicopedagógica en los términos que establezca la jefatura de estudios.
·        Atender y cuidar junto con el resto de profesores del centro, a los alumnos en los periodos de recreo y en otras actividades no lectivas.
·        Coordinar la intervención educativa desde los distintos niveles de concreción curricular.
·        Facilitar el conocimiento de los alumnos tanto a nivel individual como grupal.
·        Valorar las características y necesidades de los alumnos.
·        Posibilitar la colaboración entre los distintos profesores en el proceso de evaluación de los alumnos.
·        Establecer y consensuar los criterios de evaluación del alumnado.
·        Realizar el seguimiento del proceso de enseñanza-aprendizaje del alumnado.
·        Traspasar la información del grupo de alumnos a su nuevo tutor tanto en el paso de ciclo como en el cambio de etapa.
·        Coordinarse con el EOEP para dar una respuesta educativa ajustada a las necesidades educativas especiales del alumnado.
·        Hacer respetar las normas de convivencia establecidas en el centro.
·        Programar las actividades realizadas en periodos no lectivos.

2.     CRITERIOS DE ASIGNACIÓN DE TUTORÍAS

            Los criterios que este centro tiene en cuenta para la asignación de las tutorías son por orden de prioridad los siguientes:

·        Conocimiento de las características psico-evolutivas y educativas del alumnado.
·        Criterios pedagógicos.
·        Antigüedad en el centro.
·        Horario semanal de atención al grupo.
·        Horario disponible del profesor.

            Teniendo en cuenta los criterios anteriormente descritos se opta por un sistema de rotación de tutores. La rotación de tutores en los tres Ciclos de Primaria se producirá de la siguiente manera:

-          PRIMER CICLO -> TERCER CICLO -> SEGUNDO CICLO

            No obstante, un profesor podrá ser adscrito a petición propia, cuando termine ciclo, a otro distinto del especificado en la rotación, cuando se cumplan las siguientes condiciones:

-          Que el curso elegido quede sin tutor por cese, jubilación u otras causas.
-          Que el profesor en cuestión no permanezca más de dos años con el mismo grupo de alumnos.
-          Que se produzca una permuta de mutuo acuerdo entre el profesorado.

ORGANIZACIÓN DE LOS APOYOS

            El apoyo educativo debe ser entendido como el conjunto recursos personales y materiales disponibles para favorecer el proceso de enseñanza-aprendizaje del alumnado. Este apoyo, que va desde la respuesta a las necesidades educativas de un alumno en un momento concreto (de forma transitoria), hasta las necesidades educativas especiales de determinados alumnos (de forma permanente).

viernes, 13 de abril de 2012

Práctica 3 - Dislexia: trastorno del desarrollo.

[Descripción de síntomas o rasgos]



            La dislexia es una dificultad en el aprendizaje de la lectura y de la escritura, a menudo genética, que interfiere en la adquisición y el procesamiento del  lenguaje. Es de gravedad variable y se manifiesta por las dificultades en el lenguaje receptivo y expresivo, incluido el procesamiento fonológico, la lectura, la escritura, la ortografía, la caligrafía y en ocasiones la aritmética. Se caracteriza porque las adquisiciones de la persona en el ámbito de la lectoescritura se encuentran muy por debajo del nivel esperado en función de su inteligencia y su edad cronológica. Es un problema de tipo cognitivo que afecta aquellas habilidades lingüísticas asociadas con la escritura, la  memoria a corto plazo, la percepción y la secuenciación.
            Esta confusión que presenta el niño al escribir se da en la posición de consonantes como por ejemplo confundir la –d por la –b, o confundir la –p con la –q.

            Algunos de los rasgos o síntomas principales que se pueden observar en un niño disléxico están entre los siguientes:

            La primera impresión que nos dan estos niños es que son absolutamente normales, brillantes, inteligentes y espabilados y, sin embargo, el rendimiento en la lectura y en la escritura es deficiente, no puede leer y no tienen buena ortografía.
            Por otro lado, se le puede etiquetar como inmaduro, poco inteligente, descuidado, que sigue la programación con el mínimo esfuerzo o que tiene un problema de comportamiento.
            Alto coeficiente intelectual, pero sus calificaciones en el colegio no lo demuestran, En exámenes orales le va bien, pero no en los escritos.
            Se siente “tonto”, con baja autoestima, esconde sus debilidades con estrategias compensatorias ingeniosas; se frustra fácilmente y no le gusta el colegio, la lectura o los exámenes.

            En cuanto a la visión, lectura y ortografía se queja de sentir o ver movimiento no existente al leer, escribir o copiar.
            Al leer o escribir presenta repeticiones, adiciones, transposiciones, omisiones, substituciones y revierte letras, números y/o palabras.
            Otro rasgo que presentan es que al leer no entienden lo que han leído y no les sirve releerlo puesto que siguen sin comprenderlo.

            Con respecto al oído y el lenguaje oye cosas que no se dijeron o no son aparentes para los demás. Se distrae muy fácilmente con los sonidos.
            Se le dificulta poner los pensamientos en palabras. Habla en frases entrecortadas, deja oraciones incompletas, tartamudea cuando está estresado, no pronuncia bien las palabras largas, o traspone frases, palabras y sílabas cuando habla.

            En cuanto a la escritura y las habilidades motoras presenta problemas con el copiado, la manera de tomar el lápiz es diferente y su escritura varía o es ilegible.
            Es tosco, tiene poca coordinación y es malo para los juegos de pelota o de equipo, tiene dificultades con las habilidades motoras finas y/o gruesas y se marea fácilmente con algunos movimientos.

            En cuanto a su comportamiento, salud, desarrollo y personalidad podemos decir que son extremadamente desordenados u ordenados compulsivos.
            Puede ser el “payaso” de la clase, el niño con problemas o ser muy callado.
            Puede tener un sueño muy profundo o despertarse fácilmente. Sigue mojando la cama en edad avanzada.
            Un rasgo puede ser tener fuerte sentido de la justicia, estar emocionalmente sensible y buscar la perfección. Los errores y síntomas pueden aumentar dramáticamente cuando experimenta confusión, presiones temporales, estrés emocional  o mala salud.

            En cuanto a las matemáticas y el manejo del tiempo presenta una batalla para decir la hora, aprender información o tareas secuenciales, o estar a tiempo.
            Depende siempre de contar con los dedos u otros trucos para matemáticas y se sabe las respuestas pero no puede poner el procedimiento en el papel.

            Estas características o rasgos y otros muchos son los que se pueden observar en un niño con esta dificultad en el aprendizaje.




[Edad de inicio]




            Los niños nacen con este problema, lo que pasa es que se les detecta más tarde, normalmente cuando el niño presenta dificultades para aprender, sobre todo en la escuela. Es aquí cuando se actúa para resolverlo y evitar que se empeore.
            De cada cinco problemas de aprendizaje en España, cuatro son de lenguaje escrito o de lectura.

            La dislexia se puede diagnosticar desde los 3 años de edad, ya que los niños que la sufren pueden presentar problemas en el desarrollo del habla (hablar lento), aunque es más probable poderlos identificar cuando están en primaria ya que el niño empieza a leer y a escribir  y muestra mayores síntomas.
            Lo que pasa es que hablar de dislexia antes de los siete u ocho años es muy complicado puesto que, normalmente, el criterio que se suele tomar para definir la dislexia es que el niño que la padece presenta un retraso de un año o dos con respecto a su grupo de compañeros de la misma edad cronológica.


            La dislexia no se manifiesta de la misma manera ni con la misma intensidad en cada niño. Por lo tanto, la recuperación estará determinada por las características de cada persona y por el medio familiar y escolar al que pertenece. Lo que está claro es que la base de una buena recuperación es la detección precoz, antes de que el niño viva la experiencia del fracaso. Aunque aún, en los colegios, no se lleva una buena detección de este problema.




[Curso del trastorno]




            Los factores que se muestran en la evolución de la dislexia según la edad serían los siguientes:
Niños de Preescolar (Educación Infantil):
  • Por ejemplo la historia familiar de problemas disléxicos nos puede guiar a la hora de detectar estos problemas (padres, hermanos u otros familiares).
  • Pueden presentar un retraso en aprender a hablar con claridad.
  • Tienen confusiones en la pronunciación de palabras que se asemejan por su fonética.
  • Presentan falta de habilidad para recordar el nombre de una serie de cosas, por ejemplo los colores.
  • Se confunden en el vocabulario que tiene que ver con la orientación espacial.
  • Tienen días "buenos" y "malos " en el trabajo escolar, sin razón aparente.
  • Presentan aptitudes para la construcción y los objetos y juguetes "técnicos" como los juegos de bloques (mayor habilidad manual que lingüística, que aparecerá típicamente en las pruebas de inteligencia).
  • Tienen dificultades para aprender las rimas típicas de preescolar y para las secuencias.

Niños hasta 9 años:
  • Muestran dificultades para aprender a leer y escribir
  • Aparecen persistentes tendencias a escribir los números en espejo o en dirección u orientación inadecuada.
  • Mantienen dificultad para distinguir la izquierda de la derecha.
  • Pueden aprender el alfabeto y las tablas de multiplicar  y en general a retener secuencias, como por ejemplo los días de la semana, los dedos de la mano, los meses del año, pero con mayor dificultad.
  • Presentan falta de atención y de concentración.
  • Se frustran, posible inicio de problemas de conducta.
Niños entre 9 y 12 años:
  • Tienen continuos errores en lectura y lagunas en comprensión lectora.
  • Presentan una forma extraña de escribir, por ejemplo, con omisiones de letras o alteraciones del orden de las mismas.
  • Son desorganizados en casa y en la escuela.
  • Descubren dificultades para copiar cuidadosamente en la pizarra y en el cuaderno y para seguir instrucciones orales.
  • Aumenta la falta de auto-confianza y de frustración.
  • Muestran problemas de comprensión del lenguaje oral e impreso.
  • Tienen problemas conductuales: impulsividad, corto margen de atención e inmadurez.
Niños de 12 años en adelante:
  • Presentan tendencia a la escritura descuidada, desordenada y en ocasiones incomprensible.
  • Manifiestan inconsistencias gramaticales y errores ortográficos, a veces permanencia de las omisiones, alteraciones y adiciones de la etapa anterior.
  • Tienen dificultades para planificar y para redactar relatos y composiciones escritas en general.
  • Tienden a confundir las instrucciones verbales y los números de teléfono.
  • Tienen gran dificultad para el aprendizaje de lenguas extranjeras.
  • Tienen dificultades en la percepción del lenguaje, por ejemplo en seguir instrucciones.
  • Presentan baja comprensión lectora.
  • Aparecen conductas disruptivas o de inhibición progresiva. A veces, depresión.
  • Tienen aversión a la lectura y la escritura.
Posteriormente y hasta la edad adulta, las dificultades más importantes aparecen en la comprensión de textos y son mayores cuantos más complejos son los textos a leer.




[Déficits]




            La dislexia tiene una implicancia personal y social grave, ya que impide que se enriquezcan los patrones conceptuales y que la persona se integre a la sociedad como ciudadano responsable y consciente. 
            Las familias normalmente muestran desconcierto frente a la dificultad de aprendizaje de sus hijos y no disimulan sus sentimientos encontrados de angustia y alivio, aún sabiendo que la dificultad al fin tiene un nombre, “dislexia”.
            Los padres buscan causas familiares justificativas dentro de la familia normalmente, generándose en ocasiones conflictos en la pareja, así como la sobreprotección del niño. Esto sucede cuando no hay aceptación del problema.
            Esta confusión en los padres recae en el niño, recibiendo un mensaje respecto a los logros que pueda alcanzar. El desconcierto por parte de los adultos respecto del trastorno puede impactar en las expectativas que se tengan en relación a la trayectoria escolar del niño y su futuro.
           
            También es corriente que más padres que maestros se den cuenta de la dificultad en los niños, a través de ciertas señales. Esto genera desconfianza de la familia frente a la institución educativa, surgiendo como causa de este hecho la posible falta de preparación de los docentes en cuanto a estas dificultades de aprendizaje.

            Estos problemas influyen en el niño generándole una mayor dificultad para poder desarrollarse y adaptarse a su entorno puesto que le generan una baja autoestima y autoconcepto.

            Otras dificultades que padecen los niños disléxicos son las siguientes:

·          Dificultades en el reconocimiento y escritura de las palabras

·          Dificultades en la comprensión de la palabra escrita

            Otros problemas que suelen acompañar a la dislexia son: trastorno de déficit de atención e hiperactividad, disgrafía, discalculia y trastorno del desarrollo de la coordinación.
            La dislexia provoca problemas emocionales al no poder realizar los proyectos que se desean, al tener un déficit de concentración al leer, al no comprender los textos, al sentir que nadie les comprende y que los únicos que pueden ayudar son ellos mismos, etc.




[Ideas o creencias erróneas]




·         No es un resultado de un daño cerebral o neuronal.
·         No es causada por una mal formación del cerebro, del oído interno o del globo ocular.
·         Los niños disléxicos no son retrasados mentales: pueden tener un coeficiente de inteligencia normal o por encima de lo normal.
·         La dislexia no es una enfermedad.
·         La dislexia no sólo afecta a los niños que hablan inglés.
·         No es mejor que los niños repitan un grado escolar para superar la dislexia.
·         La dislexia no puede crecer, los niños disléxicos se convierten en adultos disléxicos, y si son identificados precozmente pueden compensar su dificultad.
·         Los niños disléxicos no sólo son los perezosos y los que no aprueban puesto que se ha demostrado que el cerebro de los niños disléxicos tiene que trabajar cinco veces más que el de los demás niños no disléxicos. Como resultado se cansan más rápidamente.
·         No se clasifican como pertenecientes a la clase baja o a familias desfavorecidas.
·         No son personas lentas que no han podido aprender.
·         No todos ven palabras en sentido inverso o al revés.
·         No más niños que niñas tienen dislexia, ocurre igualmente.
·         La dislexia no se cura con ningún tratamiento, se trabaja.
·         La dislexia no interrumpe la alfabetización.





[Consecuencias socio-afectivas
y contexto familiar]





            La dislexia tiene un denominador común, que es la etiqueta previa ya establecida por el propio afectado como por el ámbito social, escolar y/o familiar de que el niño es “tonto”. Cabe indicar que, lógicamente, cuanto más tardío es el diagnóstico de dislexia, más riesgo existe de presentar una agudización de los síntomas emocionales, pudiendo ocasionar, en periodos de adolescentes, daños psicológicos mucho más importantes, añadidos a la propia crisis de edad, exacerbando los síntomas, y a su vez, limitando la posibilidad de reconducir su historia de aprendizaje, apareciendo un alto grado de abandono en los estudios.
            El entorno cercano puede tildarlos de inmaduros, poco motivados o de vagos, y de incapaces y nulos por ellos mismos.
            No debemos olvidar que el apoyo emocional y la ayuda son esenciales sea cual sea la dificultad que tenga el niño. Cualquier actitud punitiva, de exceso de normatividad, de seriedad, distanciamiento emocional y/o castigo ante los problemas de aprendizaje por el entorno educativo o el familiar, determinan la vivencia del niño ante la dificultad, y aumentan o disminuyen su autoestima, si bien el problema de aprendizaje es el mismo. Es decir, los niños que siempre encuentran un apoyo adecuado por al menos uno de los entornos inmediatos tendrán una vivencia más positiva y de menor afectación afectiva, que aquellos que reciben presión por ambos ámbitos. El apoyo de uno de los entornos lo verbalizarán como compensador de las dificultades que encuentran en el otro.
            Mensajes del entorno escolar y/o familiar del tipo “nunca vas a llegar a nada”, “eres un vago” o “no sirves para estudiar”, se quedan grabados en su memoria y dado su bajo concepto los integran como reales y determinan, en muchas ocasiones, sus reacciones posteriores. La vivencia emocional de estas afirmaciones es, por tanto, muy acusada, mucho más de lo que la persona que lo verbaliza pueda imaginar. Los mensajes sociales son similares, en referencia al sentimiento de ser criticados por sus iguales, a consecuencia de su dificultad o de las limitaciones que ésta les conlleva, tanto en el contexto propiamente escolar, como en el deportivo, donde muchos alumnos con dislexia presentan dificultades.
Antes de conocer que éramos disléxicos
·         “Pensaba que los demás podían y yo no”
·         “Antes pensaba que era tonto”
·         “Lo pasaba muy mal en función del profesor que tenía”
·         “Pensaba que me pasaba algo porque no sabía escribir y leer como los demás”
·         “Pensaba que era inferior a los otros” 
·         “Estaba triste y no tenía ganas de hacer nada”
·         “Pensaba que era tonto, un inútil y que no se me daba nada bien”

Ahora ya sabemos lo que nos pasa…
·         “Es importante saber que eres disléxico y compartirlo”
·         “Nos dimos cuenta que no éramos tontos”
·         “Ahora puedo hablar de lo que me pasa”
·         “Las cosas en casa van mejor”
·         “No soy el único, ahora conozco más amigos que les pasa lo que a mí”
·         “Sólo necesito otra manera para entender las cosas”
·         “Ya no me preocupa girar o comerme letras”
·         “Ahora lo entiendo y ya no pienso que soy inferior a los demás”
·         “Ahora que conozco que tengo dislexia, estoy más tranquilo y contento”


Sobre la escuela…
·         “Comentaron que yo no servía, y que era mejor que dejara de estudiar”             
·         “Lo hubieras escuchado”
·         “Luego lo miras en el libro”
·         “Vuélvetelo a leer”
·         “No te corrijo el examen porque no te entiendo la letra”
·         “Por primera vez he encontrado             una profesora que me entiende”
·         “En la clase de apoyo me explican lo mismo pero con menos gente… y yo así no lo entiendo”
·          “Estudio mucho para los exámenes y dedico más tiempo para los deberes, pero las
·         notas son casi siempre bajas”
·         “Por la mañana a veces tengo dolor de barriga cuando estoy en el colegio” “ y es porque no tengo ganas de ir”
·         “Desde que empecé la escuela me ha supuesto mucho esfuerzo poder seguir el ritmo, y muchas horas de trabajo en casa”
·         “Me pongo muy nerviosa y pierdo el punto cuando el profesor me dice que tengo que leer en voz alta”
·         “Siempre llego tarde a la escuela, porque me cuesta mucho levantarme, ya que el día anterior he hecho deberes hasta muy tarde”
·         “Siempre me da mucha rabia que se me olviden las cosas”

En casa…
·         “Siempre llevaba notas de los profesores y por miedo falsificaba las firmas. Ahora no me riñen tanto y lo aceptan mejor”
·         “Siempre me han ayudado porque sacaba buenas notas y me esforzaba muchísimo.
·         El año pasado una profesora me comentó que a lo mejor era disléxico. Desde entonces me animan más”.
·         “Antes me reñían y me castigaban. Ahora me dicen que esté tranquila y que no me preocupe”.
·         “Todo el tiempo me reñían y me decían que tenía que estudiar más”
·         “Ahora me ayudan más en casa haciendo los deberes”
·         “Antes me castigaban mucho, sin tele, sin ordenador, sin game-boy…”
·         “Ya no nos peleamos tanto”

Consecuencias psicológicas de la dislexia con los compañeros:
·         “Se reían de mí porque no me salían las palabras”
·         “Me cambiaron de compañeros al llegar al instituto y lo pasé muy mal”
·         “Mis amigos pensaban antes que yo era tonto”
·         “Desde que saben que tengo dislexia me entienden más y me animan”
·         “Un día me dijeron que era un chollo tener dislexia”
·         “Se rieron de mí cuando conté que había tardado tres horas en hacer los deberes”
·         “Es bueno que los demás sepan que tengo dislexia”
·         “Antes me miraban con cara rara…”



[Otras observaciones importantes]





         He observado que es importante dar recomendaciones a los profesores para que sepan cómo detectar, actuar y evaluar a niños disléxicos puesto que si se trabaja a tiempo se podrán desarrollar con normalidad. En la situación del aula se pueden dar las siguientes sugerencias específicas para trabajar con sujetos con dislexia:
·         Haga saber al niño que se interesa por él y que desea ayudarle. Él se siente inseguro y preocupado por las reacciones del profesor.
·         Establezca criterios para su trabajo en términos concretos que él pueda entender, sabiendo que realizar un trabajo sin errores puede quedar fuera de sus posibilidades. Evalúe sus progresos en comparación con él mismo, con su nivel inicial, no con el nivel de los demás en sus áreas deficitarias. Ayúdele en los trabajos en las áreas que necesita mejorar.
·         Dele atención individualizada siempre que sea posible. Hágale saber que puede preguntar sobre lo que no comprenda.
·         Asegúrese de que entiende las tareas, pues a menudo no las comprenderá. Divide las lecciones en partes y comprueba, paso a paso, que las comprende ¡Un disléxico no es tonto! Puede comprender muy bien las instrucciones verbales.
·         La información nueva, debe repetírsela más de una vez, debido a su problema de distracción, memoria a corto plazo y a veces escasa capacidad de atención.
·         Puede requerir más práctica que un estudiante normal para dominar una nueva técnica.
·         Necesitará ayuda para relacionar los conceptos nuevos con la experiencia previa.
·         Dele tiempo: para organizar sus pensamientos, para terminar su trabajo. Si no hay apremios de tiempo estará menos nervioso y en mejores condiciones para mostrarle sus conocimientos. En especial para copiar de la pizarra y tomar apuntes.
·         Alguien puede ayudarle leyéndole el material de estudio y en especial los exámenes. Muchos disléxicos compensan los primeros años por el esfuerzo de unos padres pacientes y comprensivos en leerles y repasarles las lecciones oralmente.


            La dislexia puede superarse cuando está correctamente diagnosticada y se la trata con paciencia y fuerza de voluntad. Las dificultades en la educación suelen ser el resultado de un diagnóstico equivocado y la consiguiente frustración del niño al sentirse incapaz. Busque las áreas en las que el niño se destaca y ponga el énfasis en ellas. Un niño puede tener problemas para leer, pero ser un genio en matemáticas, música, u otros campos.


El poder de la dislexia